“Tesla es la mayor compañía de robótica del mundo porque los autos son, básicamente, robots semi-sensibles sobre ruedas. Por eso tiene cierto sentido poner eso en forma humanoide”. Con esas palabras, Elon Musk explicó en una conferencia virtual por qué decidió lanzar su “Tesla Bot”, con el que pretende eliminar “trabajos peligrosos o aburridos” como agacharse para levantar algo o ir a hacer las compras.
Musk dijo el jueves que un prototipo inicial estará disponible para el próximo año y dejó una predicción de lo que sucederá gracias a este tipo de proyectos de inteligencia artificial: “En definitiva, en el futuro el trabajo físico va a ser opcional”.
La compañía está bajo un creciente escrutinio por su sistema de conducción asistida, que reguladores en Estados Unidos investigan tras una serie de accidentes. Tesla es señalada de hacer creer a los conductores que los vehículos que cuentan con el llamado sistema Autopilot se pueden conducir por sí mismos.
La controversia por el Autopilot no fue discutida el jueves en la conferencia en línea de dos horas y media y tampoco se hicieron preguntas al respecto por parte de la audiencia. En cambio, Musk aseguró que su futuro robot sería benigno. Dijo que el Tesla Bot, que tendrá manos con cinco dedos y vendrá en blanco y negro, será “amistoso” y construido de tal manera que en todo caso “puedas huir de él y apagarlo”. “Esperemos que eso nunca pase, pero quién sabe”, bromeó.
Sin embargo, Musk tiene un largo historial de productos presentados que luego no pasaron de ser prototipos. En noviembre de 2017, por ejemplo, la empresa presento el Tesla Semi, un camión de carga eléctrico que cuenta con una autonomía y una velocidad superior a la de los camiones tradicionales, ademas de contar con medidas de seguridad avanzadas. Si bien el lanzamiento estaba previsto para el 2020, el último comunicado de la compañía con respecto a este producto afirma que, como mínimo, habrá que esperar hasta 2022.