Tras los resultados de las elecciones Primarias Abiertas Simultáneas y Obligatorias (Paso), el Frente de Todos perdería el quórum propio en el Senado y la alianza macrista de Juntos por el Cambio pasaría a ser la primera mayoría en la Cámara de Diputados, pero lejos de alcanzar el quórum. Los ultraliberales de Avanza Libertad tendrían bancada propia en Diputados, el Frente de Izquierda aumentaría su representación en la Cámara baja y los partidos provinciales conservarían una veintena de bancas.
La disputa por la mayoría en la Cámara baja es uno de los objetivos centrales para el FdT en las elecciones de noviembre. Pero los resultados de las Paso golpearon duramente las ambiciones del oficialismo. La bancada oficialista arriesga en esta elección 51 de diputados de los 120 actuales, aunque con la proyección de las primarias reduciría su representación a 111 bancas, pierde 9 y la condición de primera minoría.
Un lugar que pasaría a ocupar JpC, que pone en juego en esta elección 60 bancas pero obtendría 62, con lo que pasaría a conformar una interbloque de 116 diputados. Una representación que obtiene con los triunfos en los principales distritos electorales del país donde se eligen la mayor cantidad de diputados: Buenos Aires, Ciudad de Buenos Aires, Córdoba, Santa Fe, Mendoza y Entre Ríos. Cifras que otorgan al interbloque macrista una mayor capacidad de obstrucción en la Cámara baja, donde hasta ahora hizo naufragar los proyectos más ambiciosos del oficialismo.
Por su parte, la Cámara alta renueva un tercio de su composición en la elección que definirán ocho provincias en noviembre. De acuerdo a la proyección que mostraron las Paso, el FdT que arriesga 15 bancas en el Senado perdería 6 y el quórum propio: se quedaría con 35 de los 41 escaños que tiene actualmente. Mientras que JpC, que pone en juego sólo 8 bancas se alzaría con 14, y con los 20 que conserva –entre propios y aliados— quedaría con 34, apenas uno menos de la cantidad de senadores que retendría el oficialismo. Con lo que el fiel de la balanza quedaría en manos de un reducido grupo de 3 senadores de partidos provinciales, y con ellos la suerte de las sesiones y los proyectos que estarán en danza.
El FdT sólo logró repetir triunfos y quedarse con los dos senadores por la mayoría en Tucumán y Catamarca, donde JpC se queda con la banca restante. Pero no consiguió alzarse con la mayoría de votos en provincias donde confiaba en una victoria, como La Pampa, donde las cinco listas de JpC superan por diez puntos al FdT y se quedaría con los 2 senadores por la mayoría e invierte la representación en el Senado. Lo mismo que en Chubut, donde el FdT arriesga 3 bancas y JpC le arrebata la mayoría (sumada sus tres listas) y se quedaría con 2 senadores.