Austria anunció una inédita vacunación obligatoria para toda su población a partir de febrero y se convierte en el primer Estado de la Unión Europea (UE) en adoptar medidas tan drásticas, en momentos en que el resurgimiento de los casos de coronavirus está llevando a varios gobiernos del continente a endurecer las restricciones.
El canciller, Alexander Schallenberg, informó las nuevas medidas, que incluyen un confinamiento generalizado a partir del lunes, tras una reunión con las autoridades locales y las justificó en la necesidad de «mirar de frente la realidad».
«No hemos logrado convencer suficientemente a la gente para que se vacune», dijo el líder conservador en una conferencia de prensa en la que explicó que las unidades de terapia intensiva están en una situación crítica.
«Aumentar la cifra de vacunados es la única manera de salir de este círculo vicioso», agregó el jefe de Gobierno, citado por la agencia de noticias AFP.
Austria ya había instaurado el confinamiento para los no inmunizados, pero ante la presión sobre los centros de salud decidió extender el confinamiento durante 20 días e incluir a toda la población.