Por Juan Cruz San Martín
Salitas vacías, medio hospital para todo el distrito, sociedades de fomento cerradas, una gestión generalizada que parece improvisada, obras que se adjudican pero que provienen de provincia y nación, esquinas completamente oscuras, calles que figuran asfaltadas y NO LO ESTAN. Delegaciones y sub delegaciones que no existen, y un territorio completamente abandonado por parte de la gestión local.
Ese es el panorama real del distrito donde yo resido, y se profundiza. Sin perjuicio de lo que se describió ut supra, debemos poner en evidencia la “oficialización” o completa dependencia de las sociedades de fomento para con el gobierno LOCAL, ya que, ha consumido estos espacios de encuentro, y los ha disuelto para que, lo que parece ser, temor a que aparezcan cuadros políticos con proyección real a detentar el poder municipal.
El día de cualquier vecino de nuestra comunidad local, está lleno de peligros, incertidumbres y riesgos que podrían, sin lugar a duda, reducirse notablemente. Primero se debe lograr que todos puedan comer (la mayoría de los comedores están en manos de punteros que comercializan la mercadería). En su desplazamiento al colegio o trabajo, cruzaran los dejos para no ser asaltados (hay lugares donde el transporte no llega), si son beneficiarios del plan potenciar, NO LES PROPONEN capacitación y formación, los tienen como “empleados” e incluso a veces, les quitan dinero mensual atemorizándolos de que si no lo hacen les quitan lo que les pertenece.
De la misma forma si hay vecinos que se enferman, no hay atención sanitaria federalizada (no hay salitas). A las personas de la localidad de 9 de abril les conviene ir al hospital Ballestrini de La Matanza, a los de Guillón al Hospital de Lavallol, y a los de Monte Grande, Jagüel y Canning, ir al hospital de Ezeiza, tenemos medio hospital, sin médicos ni insumos (a pesar de todo el esfuerzo y vocación de esos profesionales).
Un cuarto de nuestro distrito se inunda hasta la cintura. Los espacios públicos son más peligrosos que la franja de Gaza, y no hay convocatoria a la comunidad política, ni social, en la búsqueda de soluciones de corto, mediano y largo plazo. Hoy Esteban Echeverria, necesita MUCHO peronismo, vivimos en un POZO.
Yo hoy, miro a Esteban Echeverria, y pienso “por acá el peronismo no pasó”