La Comisión de Asuntos Cooperativos, mutuales y de organizaciones no gubernamentales de la Cámara de Diputados recibió hoy una serie de exposiciones de referentes de la actividad, en el marco de la jornada «Experiencias, desafíos y propuestas del tercer sector para la pospandemia» de coronavirus.
En el primer testimonio, el vicepresidente de la Confederación Cooperativa de la República Argentina (Cooperar), Eduardo Form, planteó la necesidad de «políticas públicas» para el sector, particularmente en materia de financiamiento.
En ese sentido, pidió la implementación de un «financiamiento adecuado», no solo a partir de «tasas de interés subsidiadas, sino también de plazos de amortización, de la rapidez con que se otorgue, porque sin crédito es imposible que se desarrolle la actividad».
Carlos Lanizotto, presidente de Confederación Intercooperativa Agropecuaria (Coninagro) llamó a «un acuerdo para alentar la inversión productiva» y juzgó como una «buena señal» la «exitosa» restructuración de la deuda externa con los bonistas privados «porque si no se restablece la confianza va a ser difícil implementar las políticas públicas que se necesitan»
«En el marco pandémico, nuestro sector esta muy agradecido, muy reconfortado, y con muchísima responsabilidad, porque hemos podido trabajar, cosa que muchos argentinos no han podido hacer», aseveró y remarcó que «la economía social tiene un rol preponderante. Donde no es la renta lo que rige sino el capital social».
Por su parte, Carlos Heller, en su doble rol de diputado nacional y presidente del Banco Credicoop señaló que «desde siempre se planteó la idea de que tenemos que hacer lo posible para que a las cooperativas no se las vea como la rueda de auxilio para enmendar al sistema capitalista, para resolver pequeños problemas cuando el sistema falla; y no está mal que eso suceda, pero no es bueno que nos encasillen en esa concepción».
«Tenemos que tener rechazo a ese concepto de que lo cooperativo es sinónimo de lo pequeño, de lo marginal, de lo ocasional, del remedio, y apuntar a una visión muchísimo más amplia», completó.
En ese sentido, manifestó: «me animo a decir que en la pospandemia deberá plantearse si el mundo va a seguir siendo el de la globalización financiera neoliberal, o si otros valores van a ocupar ese espacio; si se va a pensar el mundo desde otro lugar».
«Estoy profundamente convencido que el modelo de gestión cooperativo, o uno combinado entre cooperativas, Estado y trabajadores debería ser una organización que ocupe un rol relevante en la nueva economía», se entusiasmó.
Sobre ese punto, puso énfasis en que «hay que pasar de tener el objetivo de la maximización del lucro, al de la prestación del mejor servicio. Ese es el enorme desafío de los cooperativistas».
A su turno, Ramiro Martínez, titular de la Confederación Argentina de Trabajadores Cooperativos (Conarcoop», señaló que «es importante la capacidad de reconversión de algunas cooperativas, con ejes fundamentales en lo sanitario y lo alimentario; tal el caso de las cooperativas textiles, que dieron respuesta a organismo y municipios con la confección de barbijos».
Al inició de la reunión, la presidenta de la comisión, Soledad Carrizo (UCR) explicó que la exposición del titular del del Instituto Nacional de Asociativismo y Economía Social (Inaes), Mario Cafiero, prevista originalmente para hoy, debió postergarse por cuestiones de agenda del funcionario.