El Club Atlético River Plate despidió desde sus redes oficiales a Diego Armando Maradona con una foto del astro con la camiseta de la Selección Nacional de 1986 y una leyenda que dice “Hasta siempre, Diego”.
La historia de Maradona con River estuvo cruzada desde el inicio de su carrera ya que a inicios de 1981 estuvo en negociaciones con quien era el presidente, Rafael Aragón Cabrera, quien se reunió con Jorge Cyterszpiler y estuvieron cerca del acuerdo.
Es más, en la tapa de la revista El Gráfico del 6 de mayo de 1980, Maradona aparece poniéndose la camiseta de River tras hacerle dos goles en el Monumental bajo el título “River: ¿una solución?”, mientras se hablaba de su salida de Argentinos Jrs.
Muchos años después, Ariel Ortega, uno de los máximos ídolos de River, comparte habitación con Maradona para el Mundial 1994 y hereda su camiseta, gesto que el Burrito destacó en toda su carrera.
El último partido profesional de Maradona como jugador fue el 25 de octubre de 1997 en el Monumental en un clásico envuelto por una carta de apoyo que el propio Ramón Díaz escribió con quien no se hablaba hacía años y un saludo que quedó en la historia.
Otro jugador emblema de River como Enzo Francescoli nunca ocultó su amistad con el 10 saludándolo en cada partido que se abrazaron con las camisetas opuestas, incluso el uruguayo estuvo en la despedida del astro.
Por último, hace poco tiempo, el 28 de setiembre del año pasado, en el partido Gimnasia-River en la Plata, Marcelo Gallardo se acercó a saludarlo y con la voz entre cortada por la emoción le dijo “te quiero”.
Gallardo vivió con Maradona una situación que lo marcó para siempre: fue cuando luego de un penal errado por el Muñeco en la selección ante Australia en cancha de Quilmes recibió el llamado de apoyo de Diego.
Maradona estaba enfrentado con Daniel Passarella que era el entrenador de la selección y el ´Muñeco´ era una de las apuesta del ´Kaiser´ con la 10 en la espalda lo que generaba un gran polémica en el medio futbolero.
Sin embargo a Maradona no le importó y apoyó al Gallardo jugador, lo llamó por teléfono para decirle que tenía que seguir pidiendo la pelota y nunca hizo pública aquella comunicación que contó el Muñeco el año pasado.