Este miércoles la Conmebol publicó los audios de los chilenos Julio Bascuñán (a cargo del VAR) y Raúl Orellana (asistente) y Ostojich en el estadio Mineirao de Belo Horizonte.
Mineiro y Boca igualaron sin goles, pero finalmente clasificó el equipo local para cuartos de final al vencer en la definición por penales. Hubo serios incidentes tras la finalización del partido.
A los 18 minutos de la etapa final cuando Weigandt estableció el 1-0 aprovechando una mala acción del arquero Everson que dio un rebote largo luego de un tiro libre ejecutado por el colombiano Sebastián Villa, el VAR llamó a Ostojich para que revisar la acción por un supuesto fuera de juego de Diego González ya que al analizar la acción se ve que la rodilla del ex Lanús y Racing se encuentra con una línea roja y más cerca de la línea de meta que el pie del último adversario que se encuentra marcado con otra línea de color azul.
«Es una jugada fina de fuera de juego. Danos tiempo, Esteban», pidieron los chilenos desde la cabina del VAR y se escuchó a Bascuñán decir: «Quiero la rodilla, la rodilla azul (de González)» tomando en cuenta un offside del jugador que, según los encargados del video, trató de intervenir en la jugada.
«OK, para mí está fuera de juego en esta imagen, Ahora dejala seguir. Dame la toma abierta. Interfiere con el arquero, le disputa el balón. Por interferencia, lo voy a llamar», anticipa Bascuñan momentos antes de avisarle a Ostojich sobre las dudas que provocó la acción.
Una vez con la acción en la pantalla Bascuñan le explicó al árbitro uruguayo: «Te estoy mostrando el punto de contacto (cuando Villa ejecutó el tiro libre) y el jugador tiene la rodilla, el número 23, ahí está la línea marcada».
Ostojich, tras observar la acción, coincidió con el análisis del VAR y señaló: «Interfiere (la rodilla de González) al arquero. Va en busca del balón. No puede hacer el gesto que debe hacer por la disputa del balón. El número 23 está en fuera de juego. Julio (Bascuñan), reanudo con fuera de juego».
Tras la determinación del árbitro, el mismo que tuvo a cargo la final de la Copa América entre Argentina y Brasil hace 10 días en el Maracaná, todo cambió, los jugadores de Boca se pusieron muy nerviosos, tomando en cuenta que en la Bombonera el árbitro colombiano Andrés Rojas invalidó también una polémica que derivó en un gol del «Pulpo» González.