El secretario de Energía, Darío Martínez, afirmó hoy que las tarifas de transición en el sector se aplicarán “desde marzo o abril, como ya anticipó el Gobierno nacional, hasta la nueva RTI (Revisión Tarifaria Integral), que va a llevar un plazo de por lo menos un año”.
Martínez confirmó que se trabaja con los entes reguladores para la convocatoria de las respectivas audiencias públicas que deben realizarse en forma previa a cualquier modificacion tarifaria, al hablar en un encuentro virtual organizado por la publicación especializada “EconoJournal”.
“Queremos ir a una tarifa de transición para evitar un impacto altísimo en los bolsillos de la gente, como contemplaba la RTI de la gestión anterior, y que el usuario no tenga que comprar menos bienes y servicios para pagar la energía”, dijo el secretario.
Señaló luego que los subsidios del Estado “se mantendrán en un nivel de 1,7% del producto interno bruto (PIB)”, pero con “un uso más eficiente, para que un sector vulnerable sea atendido, mientras aquellos cuyo impacto no es grande pueden acercarse a ir pagando el costo de la energía”.
La decisión gubernamental, aclaró Martínez, se tomará teniendo en cuenta “cómo está el poder adquisitivo de la gente”.
El funcionario confió, en otro orden, en un aumento de la producción de gas en 2021, tras precisar que el 2 de diciembre está prevista la apertura de sobres de la subasta del Plan Gas Ar, lanzada ayer, y el 15 de ese mes se producirá la adjudicación.
“Se trata de un plan de estímulo con herramientas para planificar a mediano y largo plazo, frenar el declino productivo y generar un ahorro fiscal y en divisas importantes”, resaltó.
Se añadirán, precisó, “30.000 millones de m3 de gas producidos en cuatro años por trabajadores argentinos en suelo argetino, con un valor agregado creciente de PyMEs y gobiernos provinciales que aportan la calificación y los recursos naturales”.
Según Martínez, también en petróleo “hay una gran oportunidad, ya que se recuperó mínimamente el precio del barril y el esquema de retenciones a la baja permite que las inversiones transformen pesos en dólares”.
En cuanto a generación eléctrica, “no estamos mal, y tampoco en transporte, pero sería muy bueno mejorar, sobre todo para incluir a las renovables al Sistema Interconectado”.
El secretario consideró que en distribución “hay que poner el ojo y el detalle en un control muy exhaustivo, dado que durante algunos años se estuvo más pendiente en buscar la tarifa que en planes de inversión, con lo cual tenemos que actuar rápidamente”.
“Por eso estamos avanzando en un convenio con la provincia de Buenos Aires para transferencia de determinadas obras específicas” y por otra parte, en las próximas semanas se mantendrán mesas de trabajo con las distribuidoras de electricidad “para analizar sus números y la morosidad que ha generado la pandemia”.
La política energética, agregó, “tuvo muchos vaivenes, fue contradictoria y generó un ambiente enrarecido, de desconfianza, desinversión y declino productivo, que este año en gas es del 7,5%, lo que nos lleva a la necesidad de importar a un costo más elevado con divisas que hoy no tenemos”.
Martínez destacó por último que se trabaja en un proyecto de ley para promoción de inversiones hidrocarburíferas, con aportes de todos los sectores, “para volver a generar previsibilidad y que aumente de modo importante la producción de petróleo, sin que eso afecte al mercado interno”.