La llegada del billete de $10.000 a las calles se dará en forma paulatina. Luego de que este martes el Banco Central pusiera en circulación el nuevo billete de mayor denominación de la economía, comenzarán a aparecer en los bancos recién entre este viernes y este lunes, aunque las entidades advierten que la velocidad de circulación será lenta por muchos meses.
Hace poco más de un mes, dos directores del Banco Central habían anunciado que el nuevo billete con la cara de Manuel Belgrano y María Remedios del Valle entraría vigencia este mes para alcanzar «circulación plena» en las vacaciones de invierno de julio, en un momento donde la demanda de dinero alcanza uno de sus picos en el año. En los bancos son más cautos con esta proyección.
En el Banco Nación, por ejemplo, confirmaron a Clarín que estos billetes ya están llegando a la Casa Central y están siendo distribuidos en las sucursales. En un banco privado, en tanto, aseguraron que desde el lunes podrán retirarse por caja, pero «para grandes operaciones». En una tercera entidad coincidieron y explicaron que en los cajeros automáticos aún no podrán conseguirse porque «los nuevos billetes requieren una adecuación de los sistemas».La adecuación de los cajeros es un tema clave. Recién esta semana, que el BCRA puso en circulación el billete, las empresas que gestionan las terminales de ATM pudieron comenzar a evaluar si es compatible con los sistemas vigentes y cuáles son los cambios que deben hacerse para poder ofrecerlos.
En otro banco de capitales extranjeros recordaron que la «circulación masiva» de los últimos billetes emitidos por el Central demoró varios meses. «Por ejemplo el de $ 2000, tardó muchísimo en verse, o sea, pasaron meses para que los cajeros automáticos puedan entregarlos, porque hay que adaptar cajero por cajero automático, esto es larguísimo», explicó una fuente, que señaló: «Se nota que hay una enorme ansiedad de la gente: todo el mundo quiere ver el nuevo billete. Pero va a tardar».
En los últimos meses comenzaron a circular cada vez más los billetes de $ 2000, que son aproximadamente el 7% del total de los disponibles en el mercado, y los cuales le hacen frente a los más de 6000 millones de billetes de $ 1000 que hay en la actualidad.
El Central (BCRA) había encargado a principios de año la impresión de 770 millones de billetes a la empresa estatal China Banknote Printing and Minting Corporation (CBPM). Las entidades dicen que, al tratarse de un billete importado, estas adecuaciones serán 100% necesarias y demorarán un tiempo.
En otra entidad señalaron: «De por sí, la circulación del billete de mayor denominación es mucho más lenta que la de baja denominación. Son billetes que no van a querer gastarse enseguida: cuando uno recibe un billete de estos busca guardarlos y no gastarlos tan rápido como los de $1.000 o $2.000. Por lo tanto, el Banco Central, si bien está metiendo bastantes billetes de estos, tampoco es tanto en proporción a la cantidad total».