De acuerdo a reportes realizados por el Ministerio de Salud porteño, la curva de contagios de residentes se estabilizó en las últimas horas en un promedio de casi 1.100 casos positivos diarios.
La otra estadística que miran a diario es la ocupación de camas. En el sector público (44,3% de las camas para pacientes graves ocupadas) y en el sector privado (60,3%) se registró un descenso constante en las últimas semanas luego de haber alcanzado cifras por encima del 90 por ciento.
Esos dos datos impulsan al gobierno porteño a avanzar con algunas flexibilizaciones, según anticiparon fuentes oficiales, y de no haber cambios significativos en los próximos dos días, la Ciudad de Buenos Aires se apresta a habilitar los encuentros sociales en domicilios privados, que actualmente están prohibidos, siempre que se realicen en patios o terrazas, con un aforo de hasta 10 personas.
A la par, se ampliará la habilitación para encuentros en lugares públicos y podría haber otras modificaciones como la reapertura de más estaciones de subtes que actualmente están cerradas y una extensión del horario en el que los porteños tienen permitido circular libremente por la vía pública.
En el gobierno porteño coinciden en que tarde o temprano se desatará una tercera ola, probablemente impulsada por la aparición de la variante Delta de coronavirus en la Argentina. Por eso, quieren aprovechar esta ventana con indicadores estables para darles un respiro a los ciudadanos antes de que comience la etapa de mayor endurecimiento.