En el estado de Bolívar, ubicado a unos 700 kilómetros al suroeste de Caracas, Venezuela, se desencadenó una tragedia el pasado martes, cuando un derrumbe en una mina ilegal de oro a cielo abierto cobró la vida de al menos 20 personas y dejó a otras 15 heridas, según informaron las autoridades el miércoles.
El deslizamiento de toneladas de tierra y piedras ocurrió en una zona rural del municipio Angostura, en el estado de Bolívar, aproximadamente a unos 770 kilómetros al suroeste de Caracas, como explicó el gobernador Ángel Marcano, del partido oficialista PSUV, durante una conferencia de prensa en La Paragua, una localidad cercana a la mina.
Marcano detalló que el deslave dejó a un número aún indeterminado de personas atrapadas bajo los escombros, lo que ha dificultado las labores de rescate. Para intensificar las operaciones de salvamento, la gobernación ha desplegado dos helicópteros en la zona.
La explotación minera en la región, en su mayoría realizada por mineros sin los permisos correspondientes, es una actividad habitual en busca de la riqueza mineral, en particular el oro. Sin embargo, esta actividad se lleva a cabo sin regulación estatal, lo que aumenta el riesgo de accidentes graves como este.