«La jornada laboral docente es de lunes a viernes. Paramos para reclamarle al GCBA que respete los derechos laborales de lxs trabajadorxs de la educación», fue la consigna de UTE.
En el marco de la medida de fuerza, el gremio anunció «abrazos a las escuelas, semaforazos, asambleas y clases públicas».
«Rechazamos la suspensión de la Jornada EMI el 31/10 y que se nos convoque a trabajar un día sábado», dijeron por su parte desde Ademys, y pidieron «capacitaciones en servicio y espacios de intercambio dentro de nuestra Jornada laboral».
«Rechazamos absolutamente que se nos convoque a trabajar un día sábado, aún cuando esto implique, como ha deslizado el gobierno, un pago por la asistencia ese día», agregaron.
Según advirtió el gremio en un comunicado, «con esta definición el gobierno avanza sobre nuestro derecho a la capacitación en servicio y a tener espacios de intercambio al interior de cada institución en el marco de nuestra jornada de trabajo».
Durante la mañana del jueves, docentes porteños se concentraban en el cruce de las avenidas Corrientes y Callao.