El Ente Nacional Regulador del Gas (Enargas) estimó que la construcción del primer tramo del gasoducto Néstor Kirchner permitirá «en el corto plazo» un ahorro en subsidios por US$ 1.000 millones anuales, a la vez que generará un impacto positivo en la balanza comercial energética por alrededor de US$1.800 millones.
«Se estima que en el corto plazo, con la construcción del tramo Tratayén – Salliqueló, se podrían ahorrar subsidios para el Estado Nacional cercanos a los US$1.000 millones anuales», señala el comunicado del Enargas.
En este sentido, la información añade que también generará un «impacto positivo en la balanza comercial energética, por menos importaciones y más exportaciones, que rondaría los US$1.800 millones al año, permitiendo mejorar los ingresos públicos de las provincias por más de US$100 millones al año».
El titular del Enargas, Federico Bernal, destacó la importancia de haber recuperado YPF para desarrollar una agenda energética con inversiones que incluyen la construcción del gasoducto Néstor Kirchner.
«El lanzamiento de esta extraordinaria obra se da a una década de aquella decisión estratégica tomada por la ex presidenta Cristina Fernández de Kirchner de recuperar YPF para el país y para todos los argentinos y las argentinas», señaló Bernal.