«Me encuentro constreñida -por sobre cualquier otra interpretación- a observar el mandato jurisdiccional referido», indicó la jueza en lo comercial, Marta Cirulli, al conceder con efecto «suspensivo» la apelación presentada por el Correo Argentino SA, de la familia Macri, contra el fallo que decretó la quiebra.
El presidente de la empresa que tiene como accionistas a integrantes de la familia Macri, Jaime Cibils Robirosa, apeló y pidió la «nulidad» el fallo que decretó la quiebra el 5 de julio último y solicitó que «dicho recurso sea concedido en relación y con efecto suspensivo».
En la apelación de 17 carillas, la empresa sostuvo que «la sentencia de quiebra exhibe insalvables defectos» ante lo cual resulta «innegable la absoluta revisión que merece tal decisión».
Cuestionó la competencia de la magistrada Cirulli y sostuvo que Socma Americana había recurrido al Tribunal Superior de Justicia de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires. También se puso en duda la presunta falta de análisis de propuestas y del «ofrecimiento de pago del 100% del crédito reconocido al único acreedor de la Categoría “A” (Estado Nacional) en la forma y con la extensión propuestas».
«Lo expuesto supra cobra especial relevancia, pues a pocas horas de dictarse la resolución de decreto de quiebra, el representante del Estado Nacional declaró, ante los medios, que el objetivo real de la actitud asumida por tal acreedor en el proceso, ha sido (y es) perseguir una “extensión de quiebra” a las accionistas», se agregó.