Pese al rechazo generalizado de los legisladores de La Cámpora, en la Casa Rosada confían en trasladar al Senado de la Nación el masivo apoyo que el proyecto de refinanciación de la deuda con el FMI recibió en la Cámara de Diputados.
Allí el oficialismo se encuentra con un escollo: el reglamente del Senado indica que deben transcurrir siete días desde el dictamen en comisión para el tratamiento en el recinto y solo se puede saltear esta regla y apurar el debate si se reúne una mayoría de dos tercios presentes en la sala.
El Gobierno busca acelerar el acuerdo en el Senado, pero necesitará de la oposición
Para esto el Frente de Todos necesitará indeclinablemente el apoyo de buena parte de su propio bloque y de la oposición. Aquí surgen más problemas, ya que el rechazo de La Cámpora abre incógnitas sobre cómo votarán los senadores más duros del FDT.
Mientras tanto, los contactos con los senadores de Juntos por el Cambio comenzaron desde hace semanas. En el oficialismo confían en que las modificaciones al proyecto logradas en Diputados logren allanar el camino para que las partes se puedan poner de acuerdo con mayor rapidez.
Este lunes comenzará el debate en la Comisión de Presupuesto que preside Ricardo Guerra, que contará con la presencia de Martín Guzmán y el jefe de Gabinete, Juan Manzur, tal como ocurrió en la Cámara Baja. En el oficialismo deslizan que quieren tratarlo sobre tablas el próximo jueves.
En este sentido, una fuente legislativa del Frente de Todos le dijo a TN que hay ciertas dudas respecto a si la oposición se prestará para dar los dos tercios necesarios para agilizar su tratamiento.
“Juntos por el Cambio ha sido reticente a dar esos dos tercios y creemos que van a definir su postura no en base a las necesidades del país, sino a una estrategia política”, señaló un importante integrante de la Cámara Alta. La cuestión comenzará a definirse durante el fin de semana.
Dudas sobre el voto de 12 senadores K que podrían no acompañar el acuerdo con el FMI
Fue un voto que profundizó las diferencias en el Gobierno. La Cámpora rechazó de plano el acuerdo con el FMI y sus legisladores votaron en contra. Aunque no causó sorpresa, en el Gobierno había una luz de esperanza de que estos legisladores se abstengan, para evitar desnudar aún más las internas en el oficialismo.
En este sentido, al igual que en Diputados, en la Cámara de Senadores hay dudas sobre el voto de unos 12 legisladores K que responden a Cristina Kirchner. En la Cámara Baja La Cámpora votó en contra, por lo que se desconoce cómo lo hará en el recinto que conduce la Vicepresidenta.
En el Gobierno confían en que las alarmas que se encendieron hace un tiempo ya se apagaron luego de que el Ministerio de Economía envió todos los detalles del acuerdo con el organismo a ambas cámaras. El jefe de bloque del Frente de Todos en el Senado, José Mayans, había condicionado el apoyo el acuerdo.
La lista de los indecisos se compone de Oscar Parrilli (Neuquén); Anabel Fernández Sagasti (Mendoza); Matías Rodríguez y María Eugenia Duré (Tierra del Fuego); Juliana Di Tullio (Buenos Aires), Martín Doñate (Río Negro) y Mariano Recalde (Capital).
Además, hay incertidumbre respecto al voto de María Pilatti (Chaco), Ana María Ianni (Santa Cruz), Silvina García Larraburu (Río Negro), Silvia Sapag (Neuquén) y Nora Giménez (Salta).
Por ahora los senadores del Frente de Todos se mantienen en silencio. Es una orden que bajó directamente desde la Presidencia de la Cámara.