El gobernador de la provincia de Buenos Aires, Axel Kicillof, rechazó que el acuerdo que la Argentina cerró con el Fondo Monetario Internacional (FMI) «sea contradictorio con la gira presidencial» por China y Rusia, al tiempo que pidió no analizar los entendimientos con esos países «con miradas conspirativas, ni hacer lecturas trasnochadas».
«No puede tenerse una visión tan obtusa y simplista de lo que tienen que ser las relaciones internacionales cuando el país necesita inversiones, crecimiento, acompañamiento financiero», analizó el gobernador, durante una escala en Madrid, España, que la comitiva presidencial hizo antes de emprender viaje a Barbados, último destino de la gira.
Cuando se le preguntó por los cuestionamientos formulados desde algunos sectores opositores al viaje presidencial a países «enemigos de Estados Unidos» mientras se llevan adelante las negociaciones con el FMI, Kicillof dijo que «a veces los que nos acusan a nosotros de ideológicos y antiguos en las concepciones todavía viven en la Guerra Fría».
«Un país como Argentina plantea que tiene que desarrollar y hacer más robusta las relaciones mutuas que le generan provecho y beneficios», indicó el gobernador bonaerense en declaraciones a radio El Destape y señaló que «desde ese punto, cuando uno observa la predisposición que tiene China, de compartir su crecimiento o acceder a determinadas relaciones de intercambio, es muy fácil de explicar».
Kicillof pidió no analizar los acuerdos «con miradas conspirativas, ni hacer lecturas trasnochadas», y recalcó que no cree «que el acuerdo que se cerró con el FMI sea competitivo o contradictorio» con los objetivos de la gira que encabeza el presidente Alberto Fernández.