Los rectores de las universidades públicas quieren que la ministra Sandra Pettovello se involucre directamente en la negociación presupuestaria.
La marcha federal universitaria del 23 de abril en CABA, desde un drone.
Alejandro Álvarez puso su renuncia a disposición. Antes y después de la masiva movilización del martes, el subsecretario de Políticas Universitarias le avisó primero a Santiago Caputo, después a Eduardo “Lule” Menem, dos colaboradores muy cercanos de Javier y Karina Milei, que estaba dispuesto a dar un paso al costado. Según fuentes de Casa Rosada, dijo que, de ser necesario, se tiraría “encima de la granada” si eso ayudaba a descomprimir el conflicto.
Álvarez no conoce al presidente, nunca lo vio en persona y tampoco habló con él. Pero no le hizo falta: mimetizado con el proyecto libertario, el funcionario se enfrentó puertas adentro con los rectores por los recursos y la auditoría del presupuesto que el Estado dedica al funcionamiento de las universidades públicas, una política de conflicto permanente que Milei propone a diario como base de sustentación social de su programa de ajuste fiscal.