La hermana del Presidente encabezó el acto en la planta baja de la Casa Rosada para poner en marcha su decisión, pero no habló. En cambio, el vocero Adorni estuvo encargado del discurso de inauguración.
Karina Milei junto a Manuel Adorni, Diana Mondino y Luis Petri (Fotos: Franco Fafasuli)
La hermana de Javier Milei, Karina, encabezó hoy el acto de inauguración del cambio de nombre de uno de los salones más importante de la Casa Rosada, que pasó de llamarse “Pueblos Originarios” a “Héroes de Malvinas”. Sin embargo, la Secretaria General no dijo una palabra y dejó el único discurso de la ceremonia, junto a dos ministros, los jefes de las fuerzas Armadas y funcionarios de Defensa, en manos del vocero, Manuel Adorni.
La decisión de modificar el nombre fue tomada por la propia funcionaria y mano derecha del primer mandatario, que había hecho lo propio con el Salón de las Mujeres, cuando lo redenominó “Salón de los Próceres” y descolgó los cuadros de figuras femeninas de relevancia histórica para el país para reemplazarlos por otros sólo de hombres. En su entorno aseguran que habrá más cambios del estilo en el Palacio, aunque no aclararon si avanzarán sobre el Eva Perón, el Blanco o el de los Escudos, los más importantes del palacio gubernamental.
La ceremonia, breve, empezó pasadas las 15 y duró menos de media hora, incluyendo la tanda de fotografías y charlas a las que accedió tener la funcionaria con familiares de veteranos. La Secretaria estaba acompañada, además de Adorni, por la canciller, Diana Mondino, y el ministro de Defensa, Luis Petri, que había llegado junto a una comitiva amplia de colaboradores y uniformados. Además de cambiar la denominación, Karina Milei hizo colgar en las paredes varias fotos de combatientes durante el conflicto y ordenó colocar una serie de vitrinas con objetos que pertenecieron a soldados y generales.
“La Casa Rosada es patrimonio de todos y debe honrar a nuestros héroes de la patria. Mientras muchos sectores ponen banderas partidarias por encima de nuestra insignia nacional, estos hombres defendieron nuestra bandera, nuestro tesoro más preciado”, leyó Adorni, en un tiro por elevación al kirchnerismo, aunque sin nombres propios. Estaba parado en el atril junto a Karina Milei, de frente a los invitados que los escuchaban desde la primera fila: el jefe del Estado Mayor Conjunto, brigadier general Xavier Isaac; el jefe del Estado Mayor General del Ejército, general de brigada Carlos Presti; el de la Armada, contraalmirante Carlos Allieivi; de la Fuerza Aérea, brigadier mayor Fernando Mengo; el secretario Legal y Técnico, Javier Herrera Bravo; la secretaria de Malvinas, Paola Di Chiaro; la subsecretaria de Planificación General, María Belén Agudiez y el subsecretario de Justicia, Sebastián Amerio. En la parte trasera del salón, de pie y solo, escuchaba el asesor de Milei, Santiago Caputo.
También en la primera fila, a la izquierda, se ubicaron los familiares de Ricardo Akins, el ex combatiente de Malvinas asesinado en Lanús este fin de semana, a quien Adorni dedicó unas líneas: “Queremos expresarles nuestro más sentido pésame por su pérdida. Vamos a llevar las consecuencias hasta el final para que los responsables paguen por este crimen. Es nuestro deber defender a los héroes de Malvinas, como ellos defendieron nuestras islas”, dijo.
La decisión de cambiar el nombre de la hermana del Presidente
En un despacho de la Presidencia contaron que la decisión de cambiar el nombre “era lo que correspondía”, y argumentaron que los derechos de los pueblos originarios en el país “generan controversia”, en referencia, por ejemplo, a los militantes mapuches en el sur, a diferencia de la causa por la soberanía de las islas que, sostuvo un importante asesor, “une sin diferencias a todos los argentinos”. Para explicar la decisión, recordaron reivindicación que hizo Milei de la tarea de Julio Argentino Roca y la campaña al desierto.
La funcionaria ordenó colocar una serie de vitrinas con objetos que pertenecieron a soldados y generales.