Amparo López, vocera del centro de estudiantes del Instituto de Enseñanza Superior en Lenguas Vivas «Juan Ramón Fernández», quien acaba de pasar a quinto año, aseguró que esta iniciativa es un «guiño a los empresarios» y que no harán más que «generar mayor precarización».
«Hoy nos despertamos con esta noticia inconsulta, obviamente a través de medios de comunicación, como suele suceder con este tipo de anuncios educativos», manifestó la joven en diálogo con Télam.
La vocera rechazó la «decisión política» del jefe de Gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta, y la ministra de Educación, Soledad Acuña, de «cerrar las instancias de diálogo» con las comunidades educativas, que «somos quienes transitamos a diario las instituciones educativas y que sabemos qué es lo mejor para nuestra educación».
La joven afirmó que estos «ataques sistemáticos a la educación» son una contribución a la construcción de una ciudad que «no incluye a los estudiantes ni a las comunidades educativas ni a los jóvenes».
Por su parte, Luz Schiffmacher, vocal del centro de estudiantes del Colegio Nacional de Buenos Aires (CNBA), aseguró que -contrario a lo que se argumentó- esta «no es una respuesta válida» ante la demanda de empleo para las juventudes. «El problema del desempleo joven no está en falta de formación, sino en que no se está creando empleo porque siempre buscan abaratar la mano de obra», expresó la vocal.
Si bien esta medida no afecta al CNBA por depender de la Universidad de Buenos Aires, la estudiante anticipó que «nos puede afectar después de que pase por todas las escuelas modelo» y que es necesario «dar una lucha en conjunto con todos los centros de estudiantes secundarios».