El municipio de Tandil reportó este lunes 121 nuevos contagios de covid-19, la mayor cantidad de casos registrados en un día en la ciudad. Además de esta cifra récord, el total de infectados desde el inicio de la pandemia ya se acerca a los dos mil, siete veces más de los que había hace poco más de un mes, cuando el intendente radical Miguel Ángel Lunghi anunció que dejaba el sistema de fases establecido por las autoridades provinciales y nacionales para implementar criterios propios en la apertura de actividades. «La situación es preocupante, Tandil está transitando sus peores días y todo parece indicar que las semanas venideras serán las más difíciles», Rogelio Iparraguirre, presidente del bloque de concejales del Frente de Todos (FdT) de Tandil.
El pasado siete de septiembre, cuando Lunghi presentó el sistema de estadios conformados a modo de semáforo -rojo, amarillo y verde- los casos totales registrados en Tandil eran 271 y se reportaba un fallecimiento, mientras que ese mismo día se sumaron 11 contagios nuevos. Poco más de un mes después, este lunes el municipio informó 121 casos diarios, lo que elevó el total de infectados a 1.927, de los cuales 717 tienen el virus activo y 13 se encuentran en terapia intensiva. Hasta ahora, las muertes producidas por covid-19 en la ciudad son 26. Al igual que ahora, el 7 de septiembre Tandil se encontraba en fase amarilla, lo que permite, entre otras cosas, el funcionamiento de «todas las actividades económicas y rubros con protocolos autorizados» con el «25 por ciento de su capacidad ocupacional«, según informa el municipio.
«Hasta el 20 de agosto fuimos casi una isla, llegamos a estar 73 días sin casos. Ese día tuvimos un pico de 32 contagios y ahora la tasa de duplicación está en 12 días con más de cien infectados diarios», indicó Iparraguirre, quien detalló que del total de casos desde marzo hasta hoy, «el 90 por ciento se dio en los últimos 21 días y no hay razones objetivas que permitan creer que esto va a cambiar».
Solo dos días después de implementado el sistema de semáforo, y luego de registrarse un aumento en los contagios que incluyó brotes en geriátricos de la ciudad, Tandil debió ingresar al estadio rojo para restringir toda actividad que no fuera esencial. Así se mantuvo hasta el pasado 30 de septiembre, cuando la intendencia decidió regresar al estadio amarillo a pesar de la cantidad de contagios. En principio, la fase amarilla se mantendrá hasta este miércoles 14 de octubre, cuando Lunghi deberá anunciar si el municipio continúa en ese estadio o regresa al rojo.
«La discusión de los colores del semáforo es una discusión que los tandilenses nos tendríamos que haber ahorrado. Fue una decisión inconsulta e irresponsable, pero lo más grave no es el semáforo en sí, sino que eso generó el caldo de cultivo para que la sociedad se relaje. Si la máxima autoridad dice ‘a mí ningún D.N.U me va a decir qué hacer’ y hace lo que quiere, los vecinos también van a decir yo hago lo que quiero», sostuvo el concejal del FDT. Aunque desde hace cinco días Tandil registra más de 100 contagios diarios, según Iparraguirre este martes las calles de la ciudad fueron «un hervidero de gente».
Las 13 camas de terapia intensiva ocupadas con pacientes covid-19, sin contar los que sufren otras afecciones, también constituyen una preocupación para el sistema de Salud del municipio. Según el concejal, el total de camas de terapia entre el sector público y el privado son 22, con seis médicos terapistas en el público y cinco en el privado: «Además de las camas hay un límite muy grande en el recurso humano. Uno debería creer que durante los primeros cinco meses y medio en los que casi no tuvimos casos se trabajó para ganar tiempo y robustecer el sistema de Salud, pero lo cierto es que tenemos exactamente el mismo sistema que teníamos en marzo. Hoy estamos escuchando que ya se prepara el sistema de derivaciones dentro de la región sanitaria a la que pertenecemos».