Por Rodolfo Tailhade, diputado nacional.
El juez Julián Ercolini sobreseyó con la velocidad de un rayo al ex secretario de Comunicación del gobierno del golpista Mauricio Macri, Jorge Grecco, un periodista devenido en multimillonario.
Parece que los funcionarios macristas no tienen la mala suerte de los kirchneristas, que cuando son investigados por Ercolini están años y años sometidos al proceso. Eso para no hablar de las reaperturas delictivas que ordenó este juez en varias causas y las detenciones ilegales de dirigentes opositores sin más prueba que la tapa de los diarios y las editoriales de los columnistas principales.
Pero en este caso el sobreseimiento apurado de Grecco se sustenta en argumentaciones bochornosas, que son exactamente las mismas que planteó el imputado. Es decir, Ercolini tomó al pie de la letra la defensa del acusado.
Grecco dice que cobró $ 52.061.536,66 por la venta de sus acciones en la sociedad denominada Disvol el 17 de marzo de 2017. Tenía 1.200 acciones que había adquirido en 2014 y que declaró a un valor total de 4 euros.
Sin embargo, ese no era el valor real ya que el propio Grecco expresó que al cierre del período 2016 corrigió el modo de calcular el valor de la propiedad de las acciones, al dividir el patrimonio neto de la empresa por 100 y multiplicarlo por su porcentaje expresado en acciones (1,88 %), lo que arrojó la suma de $ 548.310,05. Es decir que, siguiendo el cálculo que hace Grecco, el valor total de Disvol, en aquel entonces controlante de Edelap, era de poco menos de 60 millones de pesos. Disparatado.
76 días después de ese “ajuste”, vendió esas acciones a un precio 100 veces superior. Valían a fines de 2016 poco más de $ 500 mil y menos de tres meses después por ese paquete recibió la suma de $ 52 millones.
Asimismo, resulta incomprensible que no haya llamado la atención del juez que el incremento patrimonial de Grecco en este aspecto obedeció a medidas del gobierno que él mismo integraba como Secretario de Estado. En efecto, fue la política tarifaria del gobierno de Macri la que impulsó directamente el enriquecimiento desproporcionado del imputado, miembro prominente de ese gobierno, lo que debió haber determinado a profundizar la investigación para establecer la posible comisión de otras figuras delictivas, como las negociaciones incompatibles.
Grecco alega además que, en 2017, con aquellos $ 52.061.536,66, compró un departamento en Av. Libertador de CABA por 810.000 dólares ($ 13.481.880) y una casa en Colonia, Uruguay, por 350.000 dólares ($ 3.307.500).
Dice que con los $ 35.272.156,66 restantes adquirió una participación en el Fondo Común de Inversión AXIS por $ 7.648.430, con lo que le quedarían $ 27.623.726,66 para la inversión que afirma haber hecho en Pershing Advisor Solutions LLC, “una cartera de valores cuyo valor al cierre del ejercicio 2017 totalizaba la suma de 1.857.054.82 dólares americanos equivalentes a unos $ 434.706.750”, según la sentencia de Ercolini.
Más allá de que la inversión en la firma Pershing Advisor Solutionns nunca fue declarada por Grecco, para que esos US$ 1.857.054,82 equivalgan a los $ 434.706.750 declarados, la cotización del dólar para ese momento, cierre del año 2017, debería haber sido de $ 234,08. Pero la verdad es que el dólar valía $ 17 y en consecuencia la cantidad de dólares que tenía a ese momento Grecco debe estimarse en algo más de US$ 31 millones, un valor que no cierra bajo ningún aspecto.
Resulta asombroso cómo el juez Ercolini admite como válida la argumentación de que US$ 1.857.054,82 equivalían a casi $ 435 millones.
El sobreseimiento de Grecco, al igual que su enriquecimiento, es ilegal.